Volkswagen Navarra invierte 85 millones en el nuevo taller de fosfatación y cataforesis

EUROPA PRESS 29/01/2014 16:46

La inauguración de las nuevas instalaciones, cuyas obras comenzaron hace 23 meses, ha contado con la presencia de la presidenta del Gobierno de Navarra, Yolanda Barcina, del responsable de Producción y Logística de la marca Volkswagen y presidente del Consejo de Administración de Volkswagen Navarra, Hubert Waltl, y el director general de Volkswagen Navarra y presidente del Comité ejecutivo de la fábrica, Patrick Danau.

Al acto han asistido también una treintena de directores y altos ejecutivos de otras fábricas de la marca Volkswagen repartidas por el mundo, y diversos representantes de la administración navarra como la vicepresidenta del Ejecutivo, Lourdes Goicoechea, el consejero de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración local, José Javier Esparza, el director general de Industria, Iñaki Morcillo, el alcalde de Pamplona, Enrique Maya, y el alcalde de la Cendea de Olza, Peio Azparren.

Según ha informado Volkswagen Navarra en un comunicado, con el acto de este miércoles se materializa una apuesta más por el futuro de la fábrica navarra, que cuenta con más de 4.900 trabajadores de plantilla, después de los 600 contratos de trabajo formalizados desde los pasados meses de octubre y diciembre.

La planta se encuentra en pleno lanzamiento del restiling de la quinta generación del Volkswagen Polo, que se presentó este martes 28 en Wolfsburg, la sede central del Grupo.

PRUEBAS DE FUNCIONAMIENTO.

En estas primeras semanas del mes de enero se han venido realizando las pruebas de funcionamiento de las instalaciones del nuevo taller de TTS y KTL, que sustituyen a las existentes hasta ahora, del año 1981, y en la que habían sido tratadas desde entonces más de 6,7 millones de carrocerías de los diferentes tipos de coches fabricados en la planta.

El taller actual, con una superficie útil de 27.000 metros cuadrados y 27 metros de altura interior libre, está preparado para trabajar de una manera completamente automática, y tratar hasta 1.700 carrocerías al día -frente a las 1.500 máximas de la instalación anterior-.

Además de su mayor capacidad, sus instalaciones se caracterizan por la tecnología Rodip, mediante la cual la carrocería rota durante su inmersión en los baños de tratamiento, lo que permite reducir un 20 por ciento los vertidos a la depuradora. Por su tecnología y definición, estas instalaciones están preparadas para tratar carrocerías con piezas de aluminio, y también para alojar procesos productivos de vehículos pertenecientes a segmentos de mercado superiores en los que milita el Volkswagen Polo, lo que proporcionará mayor flexibilidad a las opciones productivas de la factoría.

ACTUALIZACIÓN DE LAS INSTALACIONES

Este taller constituye el tercer proyecto de actualización de las instalaciones de pintado de la fábrica, desde que en 2000 se construyese la primera parte del nuevo taller de Pintura, y se ampliase en 2006. Ahora, los tres talleres en paralelo, con una longitud de 300 metros cada uno, "presentan una imagen moderna de la fábrica, en consonancia con el alto grado tecnológico que albergan", ha expuesto la factoría.

Por su parte, la nueva depuradora que se ha inaugurado también, no se queda atrás en lo que a tecnología y modernidad se refiere. "Constituye un paso más en la aplicación del compromiso medioambiental de la marca Volkswagen y el desarrollo de su estrategia Think Blue.Factory, cuyo objetivo principal es reducir un 25 por ciento los consumos energéticos, las emisiones y vertidos en el periodo comprendido entre el año 2010 y el 2018, y convertirse en el constructor número 1 en el mundo por su orientación ecológica", ha añadido.

La nueva depuradora se trata del primer centro de tratamiento de aguas industriales del Consorcio Volkswagen en el que se aplica el estándar para nuevas instalaciones. En sus 1.800 m2 dispone de tres líneas de tratamiento, capaces de tratar 60 metros cúbicos de agua cada hora: una dedicada a las aguas residuales con níquel, otra para las aguas residuales ácidas o alcalinas, y una tercera para el de las aguas residuales con lacas.

El funcionamiento independiente de estas tres líneas de tratamiento permite incrementar la eficiencia del proceso, generando un 20 por ciento menos de vertidos, con tres tipos de lodos diferenciados que favorecen una mejor gestión y utilización externa. Además, todos los parámetros de consumo energético se reducirán de manera considerable; por ejemplo, el gas natural un 21 por ciento, o la electricidad, un 15 por ciento. También disminuirá el consumo de agua un 11 por ciento.

"FUTURO MEJOR"

La presidenta del Gobierno foral ha señalado, durante su intervención en el acto, que "con la inversión realizada en estas modernas instalaciones el grupo Volkswagen nos invita a los navarros a pensar en un futuro mejor para nuestra Comunidad".

"Un futuro que se caracterizará por la actividad económica, el empleo, la innovación, la calidad y el respeto al medio ambiente", ha añadido.

El responsable de Producción y Logística de la Marca Volkswagen, Hubert Waltl, ha afirmado que la fábrica navarra "va por buen camino". "Se están haciendo las cosas bien y esta fábrica se está convirtiendo en un referente en lo que a resultados y calidad del producto se refiere", ha dicho, para añadir que el nuevo Polo "que se va a comenzar a producir tiene ya la tecnología y equipamiento de coches de segmentos superiores, y estas instalaciones ayudarán a convertir a la marca Volkswagen en el constructor más ecológico del mundo".

Patrick Danau ha indicado que "estamos trabajando en todos los frentes posibles para hacer de esta fábrica un equipo altamente cualificado, capaz de desarrollar nuevos proyectos, y preparado para el futuro". "El compromiso de Volkswagen Navarra con el medio ambiente responde ya una larga experiencia y su sistema de gestión se encuentra muy bien implantado. El avance tecnológico que suponen estas instalaciones confirma esta trayectoria. Queremos hacer coches eficientes, con instalaciones eficientes", ha expuesto.