Según ha explicado la compañía en un comunicado, la promoción de sistemas colectivos y eficientes de movilidad eléctrica es "una prioridad" en el desarrollo de transportes urbanos sostenibles por cuanto supone para la reducción en la circulación de coches y la eliminación de gases contaminantes, partículas y óxidos de nitrógeno que degradan la calidad del aire.
La compañía lleva años trabajando para trasladar su experiencia en movilidad eléctrica ferroviaria a otros modos de transporte, como con el desarrollo de la tecnología SRS, un sistema de carga rápida en estaciones para autobuses eléctricos, o el proyecto con Volvo para el desarrollo de carreteras eléctricas.
En ambos casos, Alstom se basa en la tecnología APS ('alimentación por suelo') que se lleva implementando en diferentes sistemas tranviarios dese hace más de una década para ofrecer nuevas fórmulas de carga y suministro eléctrico.