Esta mejora en el resultado de la compañía de alquiler de coches refleja el beneficio completo de la remodelación de la estructura de capital tras la oferta pública de acciones de aproximadamente, 92 millones de euros que tuvo lugar en el segundo trimestre de 2015.
El resultado del primer semestre también se vio afectado por otros temas no recurrentes, como el impacto neto negativo de algunos procesos (unos 27 millones de euros) y los cargos por la reorganización ligada al lanzamiento de Fast Lane (unos 20 millones de euros), según ha informado la compañía en un comunicado.
La empresa francesa redujo sus ingresos un 1,3% en los seis primeros meses del año respecto a 2015, al alcanzar una facturación de 947,9 millones de euros.
En el segundo trimestre, el beneficio neto de la compañía alcanzó los 22,9 millones de euros, frente a las pérdidas de 87,3 millones de euros registradas en el mismo periodo del ejercicio anterior.
La facturación de Europcar entre marzo y junio se situó en 530,4 millones de euros, casi un 3% menos que en los mismos meses de 2015, cuando los ingresos totales fueron de 546,8 millones de euros.
La compañía llevó a cabo en este tiempo su plan de adquisición, que incluía la compra de la francesa Locaroise en mayo, la de la española Bluemove en junio y, recientemente, la inversión minoritaria en Wanderio.