Francis es uno de los inmigrantes afectados. Se compró su vivienda hace 4 años. Una inmobiliaria le puso en contacto con un mediador bancario que se encargó de todos los trámites para conseguir una hipoteca. El mediador le hizo firmar papeles sin saber lo que ponía, porque no entendía bien el castellano. Sólo tuvo que presentar su nómina, 950 euros al mes, y sin ni siquiera reunirse con los del banco le dieron el 100% del valor el piso y un 20% más para las reformas que tuviera que hacer. El abogado Antoni Iborra que representa a la plataforma de afectados afirma que "alguien, aprovechándose de que no conocían el idioma, ni cómo va esto de las hipotecas les ha estafado"
Para conseguir que el banco le diese el dinero el mediador tasó el piso por un valor superior al precio de mercado. Después junto a la nómina del afectado, presentó las de familiares y amigos. Así consiguió engordar los ingresos: "firmé una hipoteca y empecé pagando mil, luego al cabo de un año me empezaron a pedir 1300 y luego mucho más de lo que cobro! No puedo pagarlo!", explica Francis. Como él hay 130 personas que fueron víctimas del boom inmobiliario y de los especuladores, "ya no puedo pagar mis deudas, dónde está mi dinero!", afirma otra de las víctimas.
Los bancos han embargado el piso de los inmigrantes afectados, pero también les reclama dinero, tienen que pagar la cantidad de más por la que fueron tasados los pisos. Ahora los afectados se han constituido en una plataforma para denunciar conjuntamente a estos mediadores, pero no es fácil, las inmobiliarias que les pusieron en contacto han cerrado y de los estafadores nada se sabe.