Las ventas de la compañía se situaron en su último año fiscal en 2.216,5 millones de dólares (2.010 millones de euros), lo que supone un 11,2% más en comparación con los 1.993,8 millones de dólares (1.808,1 millones de euros) que ingresó en el mismo periodo del año anterior.
En el cuarto trimestre del año fiscal, Domino's Pizza obtuvo un beneficio neto de 62,8 millones de dólares (56,9 millones de euros), un 43% más que en el mismo periodo de 2014, mientras que las ventas aumentaron un 15,2%, hasta los 741 millones de dólares (672 millones de euros).
El presidente y consejero delegado de Domino's, J.Patrick Doyle, ha afirmado que su red de franquicias fuertes se ha vuelto más rentable durante estos años de crecimiento positivo continuado en las mismas tiendas.