Pero GM, que está luchando en los tribunales para salir de la bancarrota lo antes posible, también señaló que las cifras de ventas a particulares durante el mes pasado fueron un 10 por ciento superiores (unos 13.000 vehículos) a las del mes de mayo de este año.
"Estamos satisfechos con nuestro rendimiento entre particulares durante el mes, que demuestra la fuerte atracción de nuestros productos entre los consumidores", afirmó a través de un comunicado Mark LaNeve, vicepresidente de GM en Norteamérica para Ventas y Mercadotecnia.
Mientras las ventas a particulares aumentaron con respecto al mes de mayo, las de flotas (destinadas en su mayoría a empresas de alquiler) cayeron un 49 por ciento comparadas con las de junio del 2008.
GM expresó que la caída de las ventas de flota "fue un resultado directo de la decisión estratégica que GM tomó de programar semanas de parones en varias de sus plantas para controlar de forma ajustada los inventarios y permitir que los concesionarios de GM reduzcan mejor sus inventarios".
El fabricante explicó que en junio produjo en Norteamérica 88.000 vehículos, un 74 por ciento menos que en junio del 2008. Durante el segundo trimestre, la región produjo 394.000 vehículos, un 53 por ciento menos que hace un año.
Por marcas, Buick vendió 8.601 vehículos (un 10,7 por ciento de descenso), Cadillac 8.473 vehículos (un 40,9 por ciento menos) Chevrolet 106.712 (un 33.3 por ciento menos) y GMC 19.668 (un 36 por ciento menos). Estas son las cuatro marcas que la Nueva GM mantendrá una vez que salga de la quiebra.
Las otras cuatro marcas, que serán eliminadas o vendidas, también experimentaron fuertes pérdidas durante junio.
Hummer vendió 1.078 vehículos (un 48 por ciento menos), Pontiac 23.740 (un 16,4 por ciento menos), Saab 779 vehículos (un 58,4 por ciento menos) y Saturn 7.520 vehículos (un 60,2 por ciento menos).