La cifra de negocio de la multinacional entre julio y septiembre alcanzó los 5.547 millones de euros, un 0,8% por debajo del dato del mismo periodo de 2013, con retrocesos del 1% en las ventas de su negocio sanitario y de iluminación, mientras que la división de consumo facturó un 2% más.
En cuanto a las distintas áreas geográficas en las que opera, Philips experimentó un descenso de sus ingresos del 1% en Europa Occidental, que en el caso de Norteamérica bajaron un 3%, mientras en el conjunto de "otros mercados" aumentaron un 3%.
"Estamos afrontando una debilidad sostenida en varios mercados como China y Rusia", reconoció el consejero delegado de la compañía, Frans Van Houten.
De este modo, en los nueve primeros meses del ejercicio Philips logró un beneficio neto atribuido de 276 millones de euros, un 63,5% menos que en el mismo periodo de 2013, mientras su cifra de negocio disminuyó un 3,7%, hasta 15.853 millones de euros.