Así lo puso de manifiesto Rehn en la rueda de prensa posterior a la reunión del Eurogrupo celebrada este viernes en Madrid, donde ha explicado que el objetivo sería integrar los procesos nacionales en una dimensión más europea que permita revisar las grandes orientaciones presupuestarias de los países.
Rehn se ha mostrado "animado" ante las reacciones de los Estados miembros ante la propuesta porque el debate ha sido "muy constructivo ". Además, ha adelantado que las propuestas concretas llegarán el 12 de mayo, momento en el que la propia Comisión ejercerá su derecho a presentar iniciativas y escuchará las reacciones de los países.
En esta misma línea se ha mostrado el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, quien ha respaldado "cien por cien" la propuesta de Rehn porque "tiene mucho sentido" que los ministros de Economía y Finanzas de la UE puedan debatir los presupuestos anuales de los países, sobre todo "si no van bien encaminados".
Acuerdo rápido por un fondo de rescate bancario
El comisario europeo para el Mercado Interior, Michel Barnier, ha apostado por alcanzar un acuerdo rápido para crear un fondo bancario financiado por el sector que sirva para rescatar entidades y que se utilice de forma preventiva sin dejar que se produzca "la catástrofe".
En una sesión informativa en el marco de la reunión de ministros de Economía y Finanzas de la UE (Ecofin) que se celebra en Madrid, Barnier ha asegurado que hay que ser "ambiciosos" en la consecución de este objetivo, a pesar de que las cosas en la Comisión Europea se hacen "paso a paso".
Sobre la tasa que tendrían que pagar las entidades para financiar este fondo, Barnier ha dicho que hablar de cifras ahora dificultaría el proceso e insistió en que lo principal es consensuar los principios para llegar a un acuerdo. El comisario también ha resaltado la importancia de fijarse en lo que están planteando otros países, como Estados Unidos, y de evitar que el contribuyente esté "en primera línea" asumiendo los costes de los rescates bancarios, tal y como sucede cuando el Estado se ve obligado a salvar una entidad en peligro de quiebra.
A su parecer, es necesaria una solución más allá de los instrumentos nacionales que existen en los países de la UE, porque hay más de 40 bancos transfronterizos que hacen pensar que una respuesta nacional no es suficiente. CGS