Las cuentas remitidas por el grupo constructor y servicios a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) muestran un incremento del resultado bruto de explotación (Ebitda) del 7,2 por ciento, hasta 1.480 millones de euros, mientras que los ingresos fueron de 16.010 millones, el 4,3 por ciento más.
El beneficio neto ordinario creció el 11,6 por ciento, hasta 1.127 millones, una vez descontadas las plusvalías por la venta de las autopistas de Chile (512 millones), del 10 por ciento de Unión Fenosa (404 millones) y de Desarrollo de Concesiones Aeroportuarias (109 millones).
La buena evolución de la cifra de negocio es consecuencia del incremento de la facturación del 18 por ciento de los servicios industriales (6.477 millones) y del 11,1 por ciento de la división de medio ambiente y logística (3.148 millones), lo que permitió compensar la caída del 9,9 por ciento de la actividad constructora (6.625 millones).
No obstante, el negocio de construcción fue el que mayor cuantía aportó a la facturación del grupo, gracias a la obra civil (4.117,3 millones de euros), a pesar de que en España se ralentizó la ejecución de obras por las elecciones generales de marzo y la reducción de la licitación.
La actividad constructora internacional, que aporta el 12 por ciento de las ventas de este negocio, creció el 88,6 por ciento por el aumento de la actividad en Estados Unidos, Portugal, Grecia, Irlanda y Canadá, en tanto que en España se ha ralentizado afectada, sobre todo, por el descenso de actividad de la edificación residencial.
La cartera de obra contratada alcanzó los 11.023 millones de euros, lo que supone un descenso del 8,2 por ciento respecto al año pasado, pese al aumento de la cartera de obra civil que aumentó el 6,3 por ciento, sobre todo, por el negocio internacional.
En el área de servicios industriales y energía, ACS aumentó su facturación gracias a la evolución de los proyectos integrados (29,2% más) y a las instalaciones y mantenimiento industrial (10,4% más).
La cartera de proyectos de servicios industriales se incrementó el 6,7 por ciento hasta los 6.244,3 millones de euros.
Por otro lado, el negocio de medio ambiente y logística creció por los aumentos registrados de Urbaser (11%), de Clece (12%) y de Servicios Portuarios y Logísticos (10%).
En el área de concesiones, ACS obtuvo 66,1 millones de euros en 2008, frente a los 35,8 millones de un año antes, que no son comparables porque durante el pasado ejercicio se deshizo de la sociedad a través de la que controlaba dos autopistas en Chile.
La aportación al beneficio neto de las empresas participadas Abertis, Hochtief e Iberdrola ascendió a 17,4 millones, el 69,9 por ciento menos que un año antes, como consecuencia del incremento de los gastos financieros y los impuestos asociados a estas participaciones.
Al cierre del ejercicio, el endeudamiento financiero neto del grupo ascendía a 9.355 millones, el 43,5 por ciento menos que un año antes, al liberarse de la deuda correspondiente al 10 por ciento de Unión Fenosa vendido, así como por la reclasificación en otro apartado contable de la asociada al 35,3 por ciento que aún mantenía en la eléctrica, cuyo traspaso se ha realizado hoy.
La venta tanto de Unión Fenosa, como de las autopistas chilenas y DCA dejan a ACS un saldo inversor neto 171 millones, frente a los 3.403,2 millones netos invertidos en 2007.