De esta forma, el aeropuerto no recibirá vuelos de salida ni de entrada hasta el próximo domingo 27 de marzo, ya que la investigación forense sobre el atentado sigue en curso y no hay acceso al edificio. De hecho, el aeropuerto indicó que hasta que no se hayan evaluado los daños "no queda claro cuándo se podrán reanudar las operaciones".
Los pasajeros que hayan perdido o hayan tenido que dejar su equipaje en el aeropuerto el día del atentado deberán notificar la circunstancia a su línea aérea. Si el equipaje no había sido registrado, deberán rellenar el formulario de objetos perdidos ofrecido por el aeródromo.
El aeropuerto belga ha lamentado las molestias causadas a los pasajeros y advierte de que todavía pasará un tiempo hasta que los viajeros puedan recuperar sus pertenencias.
Los pasajeros que tenían programado para volar del aeropuerto de Bruselas durante estos días deberán contactar con las aerolíneas con las que tengan contratados sus vuelos para recibir más información.
Asimismo, Brussels Airlines ha anunciado en un comunicado la reanudación de algunos de sus vuelos con procedencia y destino a Bruselas mediante el desvío a los aeropuertos de Amberes y Lieja. "Ofrecemos alternativas para llevar al mayor número de pasajeros posible a su destino final", ha indicado Brussels Airlines.