La cifra de negocio de la aseguradora gala alcanzó en los seis primeros meses del año los 48.405 millones de euros, un 3,3% más que los 46.836 millones de euros de hace un año, debido a un aumento del 5% en la facturación del negocio de vida y ahorro y del 3% en las divisiones de propiedad y accidentes y de seguros internacionales, que compensaron la caída del 5% en la unidad de gestión de activos.
Respecto a su división española, la compañía informa de una caída del 14% en los ingresos correspondientes a la unidad de negocio de vida y ahorro, hasta los 293 millones de euros, y del 7% en su división de propiedad y accidentes, hasta los 1.026 millones de euros.
El presidente y consejero delegado de Axa, Henri de Castries, destacó los "sólidos beneficios" registrados en la primera mitad del año, que en su opinión ilustran la resistencia de su fundamentos en un "entorno complicado". Así, incidió en que se han beneficiado de su significativa exposición a sus negocios de propiedad y accidentes y de salud, que son "menos sensibles a los mercados financieros".
"Los clientes de Axa pueden confiar en la fortaleza financiera del grupo, en la gran calidad de sus operaciones y sus activos invertidos y en la diversificada de red de distribución", subrayó.