En concreto, la cifra de negocio del fabricante de Peoria (Illinois) alcanzó los 55.656 millones de dólares (40.750 millones de euros), lo que supone un 15,5% menos que los 65.785 (48.178 millones de euros) en comparación con lo que ingresó en 2012, debido principalmente a la "fuerte caída" de las ventas de maquinaría para minería.
En concreto, sus ingresos por la venta de maquinaria descendieron un 16,4%, mientras que el negocio financiero reportó a la empresa unos ingresos un 5,5% superiores a los de 2012.
Por el contrario, en el cuarto trimestre del año Caterpillar obtuvo un beneficio neto de 1.003 millones de dólares (735 millones de euros), un 43,9% más, mientras que sus ventas disminuyeron un 10,4%, hasta 14.402 millones de dólares (10.547 millones de euros).
El presidente y consejero delegado de Caterpillar, Doug Oberhelman, se mostró orgulloso del trabajo de su plantilla en un entorno "tan complicado". Así, destacó que pese al descenso de las ventas, la empresa logró un flujo de caja operativo récord, fortaleció su balance y mejoró su posición en el mercado de maquinaria.