En concreto y bajo este enfoque, las diferentes variedades de la familia Coca-Cola que incluye Coca-Cola, Coca-Cola light y Coca-Cola Zero se unificarán bajo una identidad y comunicación comunes. Así, se cambia el diseño y cada lata y botella tendrá el mismo estilo con diferentes colores para distinguir cada variedad.
De esta forma, la firma de bebidas refrescantes ha explicado que este cambio representa un paso hacia adelante para Coca-Cola, que sitúa la "posibilidad de elección" en el centro de su estrategia de marca.
La marketing manager de Coca-Cola para España y Portugal, Esther Morillas, ha calificado esta estrategia de la compañía de "rompedora" durante la puesta de largo del nuevo concepto. "Innovar, sorprender, siempre nos gusta ir un paso más allá. Coca-Cola vuelve a reinventarse para seguir conquistando el espacio de los lineales y el corazón de los consumidores", ha señalado.
Morillas ha resaltado que "se tiñen de rojo" todas las marcas y se recupera el color original coincidiendo con los 100 años de la botella. "Si la felicidad tuviera un color seguro que sería el rojo", ha reiterado, al tiempo que ha anunciado que se lanzarán 2.900 millones de botellas en España con el nuevo envase este año.
Por su parte, el director general de Coca-Cola para España y Portugal, Jorge Garduño, ha señalado durante la presentación de la nueva estrategia que el objetivo es "crecer y hacerlo de manera sostenible". "La estrategia que se lanza en Madrid es ejemplo de este gran objetivo. Además, queremos reconectar con el consumidor y situar la posibilidad de elección en el centro de esta nueva forma de comunicar", ha explicado.
En sus 129 años de historia, Coca-Cola ha apostado por la innovación para adaptarse a los gustos y estilos de vida de los consumidores, ofreciendo la posibilidad de elegir distintos sabores, así como el contenido en calorías y cafeína.