Al concluir las contrataciones en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de Petróleo Intermedio de Texas (WTI) para entrega en junio sumaron 77 centavos al precio del miércoles, aunque no logró llegar a 50 dólares durante la sesión.
Los contratos de gasolina para entrega en mayo se mantuvieron en 1,39 dólares el galón (3,78 litros) y el gasóleo para entrega en ese mes se abarató un centavo, con lo que concluyó la sesión a 1,31 dólares el galón.
Los contratos de gas natural para ese mes recortaron 13 centavos al precio anterior y terminaron a 3,40 dólares por mil pies cúbicos.
El descenso del precio de ese combustible coincidió con la difusión de datos por parte del Departamento de Energía (DOE) que reflejaron un aumento de las reservas de gas, en línea con lo que esperaban los expertos.
Las existencias de gas subieron en 46.000 millones de píes cúbicos y el total, de 1,74 billones, es un 35,8 por ciento superior al nivel de hace un año.
Otros datos que difundió el DOE el miércoles reflejaron también un nuevo alza en las reservas de petróleo la pasada semana y se mantienen en el nivel más alto en casi dos décadas.
Las reservas de crudo subieron en 3,9 millones de barriles y el total, de 370,6 millones, es un 17,2 por ciento superior al de hace un año.
Las reservas de gasolina y de destilados, categoría esta última que incluye el gasóleo de calefacción y el diesel, también aumentaron y se constató una semana más el debilitamiento de la demanda de combustibles en EE.UU. respecto del año anterior.
El volumen de productos derivados del crudo sacados al mercado, algo que los operadores evalúan como una referencia del nivel de demanda, fue de una media de 18,5 millones de barriles diarios en las últimas cuatro semanas, un 6,5 por ciento menos que hace un año.
El dólar perdió vigor ante el euro y otras divisas, lo que suele animar las compras de crudo y de otras materias primas que se negocian en dólares, en tanto que la bolsa neoyorquina oscilaba con frecuencia entre el territorio positivo y el negativo.
El precio del petróleo ha seguido en numerosas sesiones recientes la senda que marcaba la bolsa de Wall Street y se ha movido al alza o la baja en función de una mayor o menor confianza en una próxima recuperación de la economía de EE.UU. y en la demanda de crudo y combustibles.