La dimisión de Pandit, que tomó las riendas de Citigroup en los albores de la crisis financiera, se produce apenas un día después de que el banco presentara sus cuentas del tercer trimestre, cuando Citi obtuvo un beneficio neto de 468 millones de dólares (361 millones de euros), un 87,6% menos que en el mismo periodo de 2011.
El banquero de origen indio quiso agradecer en su despedida la dedicación y el sacrificio de la plantilla de Citigroup, que ha permitido al banco "emerger de la crisis financiera como una institución fuerte".
Citigroup se encuentra bien posicionada para mantener un crecimiento y rentabilidad continuados, dijo Pandit, quien explicó que "dados los progresos de los últimos años" ha considerado que "ahora es el momento adecuado para que otro tome el timón de Citigroup (...) Mike es la persona adecuada para afrontar los desafíos venideros".
Por su parte, el consejo de administración de Citigroup ha emitido un comunicado en el que destaca "el liderazgo, la integridad y la resisitencia" de Pandit durante su periodo al frente del banco en el que logró salvaguardar la viabilidad e independencia de la entidad.
"Respetamos la decisión de Vikram. Desde su nombramiento a comienzos de la crisis financiera hasta la actualidad ha reestructurado y recapitalizado la entidad, fortaleciso nuestra franquicia global y reenfocado nuestra actividad", recordó Michael E. O'Neill, presidente del consejo de Citigroup.