La previsión de la entidad presidida por Christian Noyer para el periodo comprendido entre julio y septiembre es idéntica a la realizada para el segundo trimestre, cuyo dato oficial publicará el Instituto Nacional de Estadística, Insee, el próximo jueves y que según los analistas será inferior a esta estimación.
De este modo, Francia es posible que deje atrás el dato registrado en el primer trimestre, cuando la economía gala se estancó, pero no logrará acelerar lo suficiente su crecimiento en el segundo y el tercer trimestre.
Esto complica el cumplimiento del objetivo de crecimiento para todo el año marcado por el Gobierno galo, del 1%, una previsión más optimista que la del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Insee, que esperan un aumento del PIB del 0,7% para este año, y que la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (0,9%).