La facturación de General Mills en su tercer trimestre fiscal, que finalizó el pasado 28 de febrero, disminuyó un 8%, hasta los 4.002,4 millones de dólares (3.580 millones de euros), frente a los 4.350,9 millones de dólares (3.892,3 millones de euros) del año anterior, según ha informado la compañía estadounidense en un comunicado.
En los nueve primeros meses de su año fiscal, el fabricante incrementó un 27% su beneficio neto atribuido, hasta los 1.317,8 millones de dólares (1.178,6 millones de euros), mientras que su facturación disminuyó un 5% hasta los 12.635,2 millones de dólares (11.300 millones de euros).
El presidente y consejero delegado de General Mills, Ken Powell, ha afirmado que estos resultados están "en la línea de las expectativas", ante lo que ha relacionado la caída de la facturación con el impacto de las divisas extranjeras.
"Nuestra gestión financiera disciplinada nos ha permitido aumentar nuestro margen de beneficio operativo por quinto trimestre consecutivo al tiempo que todavía se invierte", ha subrayado Powell.