"El negocio de la banca es entregar créditos y nosotros nos preguntamos, si no están dando créditos qué están haciendo. Una de las preocupaciones que tenemos es que vemos que la salida de recursos de ciertos bancos afuera, concretamente a Panamá, continúa", declaró Borja a Radio Sonorama
"Cuando uno observa la liquidez del sistema financiero se ve que hay suficiente", pero los bancos, en lugar de "invertirla aquí, porque la necesita la economía nacional para generar empleo, producción y dinamismo, cogen esa liquidez y se la llevan fuera del país", señaló.
Semanas atrás hubo una reunión entre representantes de la banca y del Gobierno, en la que supuestamente las entidades se comprometieron a renovar el crédito, especialmente el de vivienda.
Sin embargo, según el ministro, la banca no cumple los acuerdos y saca los fondos del país para invertirlos en otras naciones sin ponerlos a circular en Ecuador, por lo que vuelven la situación de la economía nacional "muy vulnerable".
Borja manifestó que el problema de la banca "no es de liquidez", pero los hechos demuestran que hay una disminución "importantísima" del crédito y ante ello recordó que "el Gobierno ha dicho que no va a tolerar un ataque especulativo de los bancos contra la economía nacional".
Eso responde, dijo, a que "el interés de especular es hacer dinero, no dando crédito a los clientes nacionales sino jugando a la especulación afuera y (de ese modo) ponen en riesgo el dinero de los ecuatorianos".
"No vamos a romper el diálogo (con la banca), pero tampoco vamos a tolerar especulaciones", reiteró y señaló que los bancos crean una situación de "desestabilización" en el país.
Por otra parte, en una entrevista publicada hoy en el diario El Universo, Borja señaló que la propuesta del Gobierno para la subasta de los bonos Global 2012 y 2030, con un descuento del 70 por ciento, "tal vez es el mejor negocio que podría hacer el pueblo ecuatoriano".
El pasado viernes terminó el plazo de registro de ofertas de los acreedores para la recompra de esos bonos, cuyo capital asciende a unos 3.200 millones de dólares.
Los bonos Global 2012 y 2030 fueron declarados en moratoria por parte del Ejecutivo ecuatoriano, que los considera "ilegítimos" por estimar que su contratación o renegociación se realizó de forma irregular en Gobiernos anteriores.
El pasado 20 de abril Ecuador informó que el precio de la recompra se fijaba en 29,5 por ciento del valor nominal, más un 0,5 por ciento como margen de negociación, y estableció como plazo el 15 de mayo para recibir eventuales "contra propuestas" de los acreedores.