La compañía destaca que el cierre de esta operación, acordada el pasado mes de junio, constituye un nuevo hito en la estrategia de rotación de activos no estratégicos que lleva a cabo para centrarse en infraestructuras y reducir su deuda.
En el marco de esta política, Hochtief ha comenzado también a cerrar la venta de las participaciones que tenía en seis aeropuertos, un proceso que confía concluya en lo que resta de año.
La compañía prevé ingresar un total de 1.350 millones de euros con la transacción de estos dos lotes de activos, en tanto trabaja en la desinversión de otros, entre los que figura la división inmobiliaria y activos de energía.