Esta decisión representa un giro de 180º respecto al impulso a la expansión internacional de Nomura dado por el anterior consejero delegado de la entidad, Kenichi Watanabe, dimitido el pasado mes de julio, quien buscaba transformar a la mayor casa de corretaje de Japón en uno de los principales actores financieros globales tras adquirir en 2008 los negocios de Lehman Brothers en Asia y Europa.
Como parte de esta expansión, Nomura fijó la sede de su negocio internacional en la City londinense, pero a raíz de la crisis de la zona euro y la recesión de la economía, el 'broker' japonés experimentó un notable incremento de costes.
"Durante una crisis, probablemente ninguno de los principales bancos de inversión a nivel mundial haga mucho dinero más allá de su mercado local y nosotros no somos distintos", señala Nagai.
"Retornaremos a nuestro mercado doméstico por el momento", afirma el consejero deleggado de Nomura, tras precisar que en este mercado se incluye el conjunto de Asia y no sólo Japón.