El nuevo presidente de la Cámara pretende sacar a los empresarios del pesimismo

AGENCIA EFE 06/07/2010 14:09

La toma de posesión de Arturo Fernández como nuevo responsable de la Cámara de Comercio madrileña -donde sustituye a Salvador Santos Campano que la ha encabezado los últimos tres años- ha tenido lugar horas después de que el también presidente de la CEIM fuera elegido para el cargo por unanimidad de los 69 vocales que conforman el pleno de la Cámara.

El acto ha reunido, entre otros, a la presidenta regional, Esperanza Aguirre; al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, acompañado del vicealcalde, Manuel Cobo; a la delegada del Gobierno, Amparo Valcárce; al presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato; al presidente del Consejo Superior de Cámaras, Javier Gómez Navarro; al presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán o al secretario general de UGT de Madrid, José Ricardo Martínez.

Todos los participantes han señalado que Fernández asume el cargo en una de las etapas más difíciles para la economía española y le han pedido que aúne esfuerzos para que Madrid recupere los niveles de crecimiento, prosperidad y creación de empleo que tenía hace dos años.

En su discurso de toma de posesión, Arturo Fernández se ha comprometido a defender los intereses de las más de 500.000 pequeñas y medianas que integran la Cámara y les ha solicitado que tengan "altura de miras" para "sacar al país del pesimismo sumando y multiplicando" esfuerzos, pero nunca "restando o dividiendo".

El nuevo presidente de la Cámara, para el que este reto no sería posible sin la "imprescindible" cooperación de los agentes sociales, ha anunciado que sus prioridades son la internacionalización y la competitividad de las empresas madrileñas, la innovación tecnológica y la formación, aunque "sin competir nunca" con la iniciativa privada.

Fernández y su predecesor Santos Campano, han apelado a la necesidad de que el Gobierno de España acometa reformas estructurales laborales y financieras "profundas y firmes", en lugar de las soluciones "parcheadas" como han calificado las medidas para el mercado laboral adoptadas recientemente por el Ejecutivo central.

Campano, visiblemente emocionado en algunas partes de su intervención, ha pedido a su sucesor que mantenga y fomente la unidad de la Cámara y la CEIM y ha confesado que le causa "enorme tristeza" ver como cierran comercios históricos de Madrid que sobrevivieron a la Guerra civil y sin embargo, no han podido superar la crisis.

El ya ex presidente de la Cámara ha pedido al Ayuntamiento y a la Comunidad que sigan apoyando a las organizaciones empresariales para que los empresarios se sientan arropados por los poderes públicos, sobre todo a la hora de acceder a la financiación.

Por su parte, la presidenta ha solicitado que no se culpe a los empresarios de los "males" de la economía española pues "en su mayoría -ha dicho- se deben a errores del Gobierno" y a Fernández le ha advertido de que empresas y comercios son los "protagonistas" del "reto" de que Madrid "salga reforzada de esta crisis" y se convierta en una de las diez regiones europeas "más punteras y avanzadas".

El alcalde de Madrid ha ofrecido a los empresarios "colaboración" del Ayuntamiento pero les ha advertido de que los poderes públicos no pueden ni deben "entorpecer" el esfuerzo de los emprendedores ni de la sociedad civil y por eso se ha mostrado partidario de la independencia de la Cámara Comercio.

La delegada del Gobierno ha centrado su discurso en la "senda de recuperación económica" que, según ha dicho, vive España a partir de las medidas de "ajuste y reactivación" del Gobierno central, cuyas "profundas reformas", ha añadido, están trayendo crecimiento y creación de empleo, argumentos que han provocado murmullos de desaprobación en buena parte de los asistentes.