El presidente de Seat confirma que hacen pruebas de mercado en China

AGENCIA EFE 24/11/2010 18:36

La iniciativa de Seat de entrar en el mercado automovilístico chino, uno de los más importantes del mundo, había sido adelantada esta mañana por el presidente de la Asociación española que agrupa a los fabricantes de coches (Anfac), Francisco Javier García Sanz, y Muir ha confirmado esta tarde que ya han empezado a testar este mercado.

Durante su intervención en el XXV Encuentro del Sector de la Automoción de IESE, Muir ha subrayado que el principal interés de Seat es fabricar desde Martorell (Barcelona), aunque eso "no impide" que se estudie el mercado chino.

China, tal y como ha recordado, se convertirá en breve en el primer mercado más importante del mundo, seguido de EEUU.

El presidente de Seat ha subrayado que la apuesta del Grupo Volkswagen, al que pertenece Seat, por llevar a Barcelona la producción del nuevo modelo Audi Q3 es un ejemplo de "la confianza" que inspira en la matriz la compañía española.

"El Q3 implica que Volkswagen tiene confianza en la plantilla de Seat y vislumbra un futuro", ha asegurado, al tiempo que ha subrayado que para el fabricante español se trata de una oportunidad para demostrar que pueden construir Audi "igual de bien que los alemanes", además de una garantía de mantenimiento del empleo.

Respecto a los planes de futuro de Seat, Muir ha adelantado que en 2011 comenzarán pruebas con flotas reducidas de vehículos eléctricos, tanto puros como híbridos, y más adelante se llevará al mercado un "paquete económico" para clientes, antes de su despliegue a más gran escala.

En esta línea, ha explicado que "sueña" con crear y establecer en Barcelona un centro de diseño y desarrollo de un coche eléctrico de Seat que cuente con una base de proveedores españoles, aunque antes la compañía debería conseguir "una plataforma de negocio sana" en Cataluña.

Por otra parte, Muir ha pronunciado una conferencia sobre los retos de la movilidad en el futuro en la que ha advertido que el advenimiento del vehículo eléctrico no será una realidad a corto plazo, en cuatro o cinco años, sino que tardará más porque el proceso es "complicado, lento y arduo", y afronta retos importantes como el de la infraestructura y el alto precio.

El presidente de Seat ha subrayado que, pese a que nadie duda de que en el futuro el coche será eléctrico, "nadie sabe todavía cuales son las alternativas tecnológicas viables", lo que se traduce en que los agentes del sector de la automoción "lo prueban todo".

El ejecutivo de Seat ha señalado que para 2020 se calcula que habrá más de un millón de unidades de coches eléctricos en el mercado europeo, que serán construidos por tres docenas de competidores, entre ellos Toyota, Honda y Volkswagen, que concentrarán el 60% de las ventas.

Europa será el "campo de batalla" para estas nuevas tecnologías, según él y serán los que se adapten más rápido los que tendrán más oportunidades de quedarse con el negocio.