Según los datos ofrecidos por la dirección de la empresa, un total de 2.542 empleados, que representan el 48,13 por ciento de los votos, se han manifestado en contra de aprobar el convenio, frente a 2.427 trabajadores (el 45,95 por ciento) que han votado "sí" en el referéndum, celebrado desde las tres de la madrugada de hoy.
Las mismas fuentes han señalado que de los 6.933 empleados que formaban parte del censo, han acudido a depositar su voto 5.282, el 76,19 por ciento, de los que 73 han votado en blanco, mientras que 240 votos han sido considerados nulos.
Fuentes de los tres sindicatos minoritarios (CCOO, CGT y STC), que habían argumentado el "no" al acuerdo de convenio, han calificado el resultado del referéndum como "positivo", ya que los trabajadores, con sus votos, "han rechazado la propuesta a la que habían llegado la dirección y el sindicato mayoritario, UGT, en solitario".
Además, han añadido que UGT "tendrá que ir replanteándose su manera de actuar y acordar dentro del Comité" y han señalado que "ahora es momento para trabajar todos junto con el fin de buscar otro convenio".
Por su parte, desde UGT se ha informado de que mañana se le trasladará a la dirección de la empresa los resultados del referéndum de manera formal y será momento para que "aquellos que han abogado por el 'no' planteen alternativas para enfocar de nuevo la negociación de un nuevo convenio".
No obstante, el portavoz de UGT en el comité de empresa, Gonzalo Pino, ha indicado que su sindicato sigue pensando que la propuesta que habían planteado "era seria y coherente y ofrecía alternativas de futuro para los trabajadores".
"Los trabajadores han tomado una decisión y la vamos a respetar", ha indicado Pino, quien ha añadido que "la responsabilidad ahora recae sobre aquellos sindicatos que han defendido el 'no' en el referéndum".
El convenio que ha sido rechazado hoy por los trabajadores de Ford recogía una vigencia de cinco años y que el Índice de Precios al Consumo (IPC) se aplicará a las subidas salariales según lo previsto para cada uno de los años.
Incluía también la aceptación de la cláusula de revisión salarial para cada año y la continuidad en la aplicación de la jubilación parcial en los términos establecidos.
Además, recogía un cambio en la distribución de las vacaciones, con una semana en Pascua, tres en verano y una en Navidad, mientras que el resto de vacaciones colectivas se asignará a puentes.
Según fuentes de todos los sindicatos, la próxima reunión para seguir con las negociaciones se celebrará una vez pasen las vacaciones de Pascua, cuando la mayor parte de los trabajadores vuelva a la factoría.