La facturación por servicios de Vodafone en este periodo ascendió a un total de 10.282 millones de euros, un 4,6% menos que un año antes, aunque un 2,2% por encima en términos orgánicos, que excluyen el impacto del cambio de moneda y del perímetro de la compañía.
La multinacional concluyó el primer trimestre de su ejercicio con un total de 272,05 millones de clientes móviles, lo que supone un incremento de 6,8 millones en un año, de los que 115,5 millones correspondían a Europa, donde perdió 5,3 millones de usuarios en el último año.
En cuanto a los clientes de líneas fijas, Vodafone contaba a 30 de junio con 15,04 millones, una cifra que supone una mejora de 1,3 millones de clientes en un año, de los que 13,6 millones correspondían a Europa, un millón más que un año antes.