Las palabras se las lleva el viento, las escritas no, ¡todo lo que tienes que saber sobre el viento!
El viento no es lo mismo que el aire
Aunque la mayoría de las veces utilizamos indistintamente viento y aire, en realidad son dos cosas completamente diferentes. El aire es un gas que constituye la atmósfera terrestre, formado principalmente de oxígeno y nitrógeno, y con otros componentes como el dióxido de carbono y el vapor de agua. Lo que sí que podemos decir que el viento es el aire en movimiento.¿Qué pasaría si se acabara el viento?
Según algunos estudios si el viento desapareciera de la Tierra y de nuestras vidas por alguna causa misteriosa, para devolverle de nuevo su movimiento se necesitarías un poder equivalente al de casi siete millones de bombas atómicasNo es broma, ¡se te puede llevar el viento!
Quizás no hayas visto nunca a un hombre volar porque se lo está llevando el viento, aunque seguro que alguna vez has sufrido un viento fortísimo que te ha desestabilizado del suelo. Pues bien un hombre de una complexión media podría empezar a despegar del suelo si el viento soplara a unos 140 km/h, y si ese viento llegara a unos 150 km/h, volaría.Siete lugares donde te llevaría el viento
Hay siete lugares en el mundo donde el viento sopla con tal fuerza que podrías salir volando. Si eres de los aventureros que te gustaría correr el riesgo ¡toma nota!El Monte Everest, por las corrientes de chorro, que son flujos de aire en altura que circulan a gran velocidad alrededor del planeta; el Monte Washington, en Nuevo Hampshire, EE.UU; Gruissan, el paraíso para los amantes del windsurf, situado al sur de Francia; Pistol River, en Oregón, EEUU; La Antártida, con vientos que superan los 320 km/h en zonas como la bahía de la Commonwealth; La Patagonia cuyos vientos son conocidos como 'Rugientes Cuarenta', 'Furiosos Cincuenta' y 'Estridentes Sesenta'; Tornado Alley, una zona de EEUU donde se dan las mejores condiciones para la formación de tornados: Texas, Oklahoma, Kansas, Nebraska, Kentucky… entre otras.El viento más fuerte jamás registrado
El 10 de abril de 1996 se registró en Barrow Island, Australia, el viento más fuerte hasta ahora registrado con 408km/h al paso del ciclón tropical Olivia. El record antes vigente fue de 372 km/h y se registró el 12 de abril de 1934 en el Observatorio del Monte Washington, en EEUU.¿Cómo se mide el viento?
El viento se mide a través de la Escala de Beaufort que fue creada en 1806 por Sir Francis Beafort, un oficial naval e hidrógrafo. Se basa en el estado del mar, de sus olas y de la fuerza del viento. La escala va desde el número 0 de Beaufort con una velocidad de viento del 0 al 1 km/h llamado ‘Calma’, hasta el número 12 con más de 118 km/h que se llama ‘Huracán’.Los vientos más famosos de España
En la Península Ibérica se generan tal cantidad de diferentes vientos que cada uno tiene nombre propio. Siete son los vientos más famosos: Abrego suele darse en primavera y otoño en Cantabria es conocido como viento castellano y en Asturias como aire de las castañas; Cierzo se localiza en el valle del Ebro, es un viento seco y con temperatura baja; Galerna es muy violento y el más conocido en el mar Cantábrico y el Golfo de Vizcaya, se da en otoño y primavera; Levante, su origen está en el Mediterráneo central, en zonas cercanas a las Islas Baleares, su mayor velocidad la alcanza en el Estrecho de Gibraltar; Poniente, viene del océano Atlántico y llega a España a la costa levantina como un viento lleno de calor y muy seco: Terral, se llama así en la provincia de Málaga y se forma cuando la radiación solar desaparece, la superficie del mar conserva más tiempo el calor, la cual se enfría con más rapidez, el aire más caliente del mar se eleva y su lugar pasa a ser ocupado por el aire más frío de la tierra; y la Tramontana, un viento que sopla con fuera sobre Baleares y alguna zona de Cataluña y se origina en el Macizo Central francés y en los Pirineos.¿Nos puede volver loco el viento?
El ‘efecto Fohen’ que se produce cuando una masa de aire entra en contacto con cadenas montañosas y provoca un brusco calentamiento del aire al descender por la ladera de una montaña, opuesta a la dirección de los vientos, puede incidir en la salud mental. En Suiza cuando llega se teme por los dolores de cabeza y la fatiga en general, y un estudio polaco lo relacionó con casos de suicidio y estrés psíquico.