Todos los copos son hexagonales, pero es prácticamente imposible encontrar dos iguales
Fue hace 14 inviernos cuando a Michael Peres, un profesor de fotografía del Instituto Tecnológico de Rochester (Nueva York), se le ocurrió fotografiar a escala microscópica los copos de nieve que caían, como cada año, sobre la ciudad. Desde entonces han pasado más de una década y, lo que comenzó siendo un hobbie, se ha convertido en una obsesión que comparte con mucho mimo en su cuenta de Instagram. Cuando nieva, está perfectamente preparado con un trozo de terciopelo y una bandeja helada para capturar los copos de nieve que caen cerca de su casa. Lo hace en su garaje, un sitio frío donde se retrasa su evaporación, y allí los coloca bajo un microscopio. Aquí te dejamos una muestra de su impresionante trabajo, en el que pueden verse peculiares formas geométricas.Todos los copos son hexagonales, pero es prácticamente imposible encontrar dos iguales
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Fue hace 14 inviernos cuando a Michael Peres, un profesor de fotografía del Instituto Tecnológico de Rochester (Nueva York), se le ocurrió fotografiar a escala microscópica los copos de nieve que caían, como cada año, sobre la ciudad. Desde entonces han pasado más de una década y, lo que comenzó siendo un hobbie, se ha convertido en una obsesión que comparte con mucho mimo en su cuenta de Instagram. Cuando nieva, está perfectamente preparado con un trozo de terciopelo y una bandeja helada para capturar los copos de nieve que caen cerca de su casa. Lo hace en su garaje, un sitio frío donde se retrasa su evaporación, y allí los coloca bajo un microscopio. Aquí te dejamos una muestra de su impresionante trabajo, en el que pueden verse peculiares formas geométricas.Todos los copos son hexagonales, pero es prácticamente imposible encontrar dos iguales
Fue hace 14 inviernos cuando a Michael Peres, un profesor de fotografía del Instituto Tecnológico de Rochester (Nueva York), se le ocurrió fotografiar a escala microscópica los copos de nieve que caían, como cada año, sobre la ciudad. Desde entonces han pasado más de una década y, lo que comenzó siendo un hobbie, se ha convertido en una obsesión que comparte con mucho mimo en su cuenta de Instagram. Cuando nieva, está perfectamente preparado con un trozo de terciopelo y una bandeja helada para capturar los copos de nieve que caen cerca de su casa. Lo hace en su garaje, un sitio frío donde se retrasa su evaporación, y allí los coloca bajo un microscopio. Aquí te dejamos una muestra de su impresionante trabajo, en el que pueden verse peculiares formas geométricas.Todos los copos son hexagonales, pero es prácticamente imposible encontrar dos iguales
Fue hace 14 inviernos cuando a Michael Peres, un profesor de fotografía del Instituto Tecnológico de Rochester (Nueva York), se le ocurrió fotografiar a escala microscópica los copos de nieve que caían, como cada año, sobre la ciudad. Desde entonces han pasado más de una década y, lo que comenzó siendo un hobbie, se ha convertido en una obsesión que comparte con mucho mimo en su cuenta de Instagram. Cuando nieva, está perfectamente preparado con un trozo de terciopelo y una bandeja helada para capturar los copos de nieve que caen cerca de su casa. Lo hace en su garaje, un sitio frío donde se retrasa su evaporación, y allí los coloca bajo un microscopio. Aquí te dejamos una muestra de su impresionante trabajo, en el que pueden verse peculiares formas geométricas.Todos los copos son hexagonales, pero es prácticamente imposible encontrar dos iguales
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