Comisiones Obreras ha condenado el ataque y ha afirmado que se dirige "directamente" contra la libertad sindical.
Según ha destacado esta central en un comunicado, todos los actos de violencia callejera "son igualmente censurables", pero en el caso de hoy, incide en la libertad sindical, que "constituye un elemento básico para construir sociedades que se pretendan justas e igualitarias".
En la nota, este sindicato se reafirma en que continuará con la "defensa en la calle y en las empresas de los derechos de los trabajadores", así como con su posicionamiento a favor de "la construcción de un país en libertad y con respeto a todas las ideas que reflejan la pluralidad de Euskadi".
El sindicato nacionalista ELA ha expresado su solidaridad con CC.OO. y UGT por el ataque y ha afirmado que estas acciones "solo generan más tensión" y "deben acabar de una vez".
ELA ha mostrado su "rechazo rotundo" ante estos ataques y ha hecho un llamamiento al respeto del derecho de libertad de sindical, "sea cual sea su forma de pensar o actuar".