Beteta aprovechó hoy su intervención en el curso 'Estabilidad y reformas ante la crisis fiscal', dentro del Campus Faes, para hacer estas reclamaciones.
"No basta con el nombre para que una reforma sea eficiente, sino que necesita ambición en las medidas que encierre. No se trata, por tanto, de cambiarlo todo para que no cambie nada, sino de cambiar todo lo que está arcaico, para que dicho cambio genere empleo de modo duradero", subrayó el consejero.
En su intervención, Beteta citó diez reformas, que consideró como "urgentes e imprescindibles", entre las que se encuentran la renovación de las Administraciones Públicas, las bajadas de impuestos, la reforma laboral y la reforma energética.ç
Además, pidió la unidad del mercado, un sistema de pensiones sostenible, la colaboración público-privad, la ordenación del suelo, la reforma del sistema educativo del sistema de investigación.