Lara, ha señalado, tras participar en una reunión de EU con plataformas de la discapacidad, que él hubiera tomado la decisión de evitar los 50 metros de 'paseillo' con "una persona que no fuera representante o familia de ninguno de los grandes poderes del Estado" porque tiene "convicciones de que la gente no se merece un escarnio público".
Así, ha señalado que la persona que ha cometido un delito "tiene que ser juzgado, condenado o pagar su delito a la sociedad, pero el escarnio público nunca ha formado parte de nuestro ADN ni de nuestra línea de pensamiento".
En cualquier caso, ha destacado que el titular del juzgado número 3 de Palma, el juez José Castro, que instruye el caso Noós, "se la está jugando" y "está de verdad plantándole cara al poder real de nuestro país".