Según ha argumentado, "la deriva de la dirección del PSC hacia posturas cada vez más alejadas del derecho a decidir ha dejado muy tocada la confianza" de los republicanos hacia el partido de Pere Navarro.
También ha asegurado que el consistorio "está empezando a dar signos evidentes de cansancio y de parálisis a muchos niveles", motivados principalmente por las luchas internas del PSC, que anteponen el tacticismo político al interés general de Rubí, según ERC.
No obstante, ha recalcado que "desde la oposición también se puede contribuir a gobernar", y ha apostado por transformar la ciudad a través de pactos y alianzas con las distintas formaciones políticas.
El pleno municipal de Rubí está formado por ocho regidores del PSC, seis del PP, cuatro de CiU, tres de ICV-EUiA, dos de ERC y dos de ACR, lo que sitúa la mayoría del pleno en 13 de los 25 regidores.