El olor fue atribuido a las labores de limpieza que se estaban llevando a cabo en una balsa de depuración de productos orgánicos perteneciente a una empresa próxima, y los 1.100 alumnos del Instituto tuvieron que ser evacuados y llevados a sus casas. La empresa suspendió las labores de limpieza y el centro educativo pudo reanudar las clases un día después.
El incidente provocó que cientos de personas se concentraran frente a la puerta de la empresa Derivados Químicos de Alcantarilla bajo el lema '¡¡Por nuestra salud!!' para protestar contra el episodio de "contaminación".
La concentración surgió de forma espontánea en las redes sociales y su objetivo era protestar contra esta empresa a la que atribuyen el origen de los olores y concienciar a la población de que la compañía "emite de forma habitual productos contaminantes".