Joaquín Almunia recalca que pese a que es "difícil" ser "optimista", no hay alternativas para España fuera de la UE

EUROPA PRESS 06/06/2016 20:01

El exministro ha participado este lunes en una jornada, organizada por el Consejo Económico y Social (CES), titulada 'España en la UE: Una historia de 30 años' y en el marco de la cual ha intervenido con la ponencia 'España y Europa: ¿salimos de la crisis?'.

"Es difícil ser optimista en este año del 30 aniversario del ingreso de España", ha defendido Almunia, que ha señalado que sigue la crisis económica por una problema de crecimiento y ha abogado por la creación de un ministro de Economía comunitario que no se limite a funciones de policía sobre el control de la reglas de déficit.

Para el excomisario, en un contexto como el actual es necesaria "una convergencia económica que se ha de hacer en cada país". En el caso de España, ha concretado, se debe "aumentar" la productividad, para lo cual ha defendido la necesidad de mejorar la educación, las condiciones para apoyar al emprendimiento y reducir los niveles de endeudamiento.

Todo ello, ha matizado, de una manera compatible con aumentar la inversión productiva, "no especulativa". "Pero del lado comunitario, se debe establecer cómo se ayuda a alcanzar esa convergencia, tomando decisiones coordinadas razonables más allá del mero cumplimiento de las reglas impuestas desde Bruselas", ha advertido.

"Hay que pasar de las reglas a las instituciones, lo que significa ceder más soberanía, dotándose de un ministro de Económica comunitario, un ministro que no se limite a funciones de policía", refiriéndose al mero control actual sobre qué países incumplen las reglas de déficit.

UN DEBATE SOBRE LO QUE ES EUROPA

Durante la jornada, el secretario de Estado de la UE, Fernando Eguidazu, ha rechazado que la UE tenga un "déficit democrático" como se dice --sí admitió tres problemas: una crisis económica, una crisis migratoria y, quizá la más grave, una crisis política-- aunque ha admitido que sí es cierto que muchos ciudadanos pueden tener la "una sensación de que la Unión Europea no se preocupa de sus problemas".

"Hay una corriente de ciudadanos que echan la culpa a los líderes políticos actuales, a los que acusan de no dar la talla. Y es una opinión injusta y simplista. Hay que entender que se trata de problemas muy complejos y, además, es muy difícil poner de acuerdo a 28 estados. Pero es la Europa que nos hemos dado", ha defendido.

Por su parte, el presidente del CES, Marcos Peña, ha defendido la necesidad de "un debate político con sosiego de primer nivel sobre lo que Europa es y lo que debe ser" y ha subrayado que desde esta organización hay un binomio compuesto de reconocimiento y preocupación respecto a esta cuestión.

"Debemos estar muy reconocidos a Europa, a lo que significa y ha significado, y no sólo en términos de PIB; es el mayor espacio de libertad que ha existido en la historia de Europa y debemos mostrar satisfacción por participar en este club. Aunque también, hay que mostrar preocupación por el desajuste institucional, económico y emocional en que está inmersa la Unión Europea", ha argumentado.