"Hay que decir la cosas como son: hay una asimetría", dijo Flores-Aráoz en declaraciones dadas a la estatal TV Perú y citadas por la agencia oficial Andina, tras precisar que su homólogo chileno, Francisco Vidal, le comunicó el 30 de abril pasado de las negociaciones para adquirir la flota aérea .
El canciller peruano, José Antonio García Belaúnde, dijo ayer que la compra es un asunto interno de Chile, pero al reflexionar sobre la adquisición de material bélico en la región se preguntó hasta qué punto se puede sacrificar el tema de la inversión social por este tipo de gastos, según Andina.
En ese contexto, Flores-Aráoz manifestó hoy que mientras Perú realiza con "magros recursos" mejoras en sus Fuerzas Armadas, otros países como Chile destinan grandes cantidades de recursos para comprar material bélico.
También destacó la importancia de la propuesta del primer vicepresidente peruano y congresista, Luis Giampietri, para destinar a las Fuerzas Armadas el 5% de las regalías y canon que se obtengan de la explotación de futuros yacimientos mineros y de otros recursos.
"Es bueno tener una capacidad disuasiva de nuestras Fuerzas Armadas para mantener todo lo demás, para mantener las inversiones, defender lo nuestro. De nada sirve hacer todo sin tener una capacidad disuasiva que permita vivir en paz", anotó.
Perú presentó en enero de 2008 una demanda ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya para fijar los límites marítimos con Chile, que Santiago considera fijados en tratados suscritos en la década de 1950, pero que para Lima son solo acuerdos pesqueros.
La demanda ha causado malestar en Chile, que suspendió desde esa fecha las reuniones de cancilleres y ministros de Defensa entre ambos países.
A finales de 2007, Chile compró a Holanda, en 185 millones de dólares, otros 18 F-16 usados, que se sumaron a una decena de aparatos nuevos comprados a Estados Unidos.
Ese mismo año compró a Holanda cuatro fragatas, en el marco de un programa de renovación de su flota naval.