La manifestación ha congregado a un millón cien mil personas, según la Guardia Urbana, una cifra que la entidad organizadora, Òmnium Cultural, ha elevado a un millón y medio, mientras que la empresa Lynce ha facilitado a la agencia Efe una estimación sistematizada de 56.000 personas.
En una entrevista en Telecinco, Montilla ha asegurado que se marchó de la cita "cuando se disolvió la cabecera, después de plegar la bandera y cantar 'Els Segadors'".
"He ido hacia donde estaba el coche oficial, que aún no había llegado", ha comentado. Según Montilla, como el vehículo se encontraba a un centenar de metros de la Consejería de Justicia, ha esperado en el interior del recinto unos diez minutos.
El presidente del Gobierno catalán ha admitido haber sido seguido por "una treintena de energúmenos", aunque ha negado haber sido agredido. "En ningún momento he sentido que peligrara mi integridad", ha añadido.
Para el también líder del PSC, "ya se sabe que intolerantes y fascistas hay siempre, y llevan diferentes banderas". "La manifestación ha hecho historia, y lo que no hace historia es la anécdota sobre la supuesta agresión", ha zanjado.
Preguntado por si, además de la 'senyera', colgará la bandera española para apoyar a la selección de fútbol en la final del Mundial, Montilla ha explicado que no suele tener banderas en casa, "ni una ni otra".
Sin embargo, ha afirmado que, "por supuesto", espera y desea que la selección española, a la que ha cualificado de "magnífica", gane ampliamente a Holanda. "Deseo de todo corazón que podamos ver buen futbol y una victoria de la selección española", ha añadido.