Después de que el domingo se presentara la ponencia económica y que el lunes se diese a conocer la de estatutos, ahora le toca el turno a la política, la que más polémica está desatando. Aunque los dos ponentes que han presentado el documento insisten en que María San Gil lo ha consensuado con ellos, lo cierto es que la líder del PP en el País Vasco no ha comparecido junto a sus compañeros. Sanchez-Camacho y Soria han asegurado que el texto recoge todas las propuestas de San Gil.
El PP se define en la ponencia política como un partido de centro, reformista y liberal y defiende una sociedad democrática, con un mercado libre, un imperio de la ley, que respeta los derechos humanos, con un gobierno limitado y libertad individual.
Una vez presentadas las tres ponenecias, los textos son enviados a los 3.025 compromisarios del XVI Congreso que tendrán un plazo de quince días para presentar enmiendas.
El documento presentado por los populares insiste en la plena vigencia del estado autonómico y reprocha la reforma encubierta que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero ha heho de la Constitución a través de las reformas estatutarias.
En materia antiterrorista el documento recoge que "jamás ningún Gobierno" debe autorizar "negociaciones" con ningún representante de ETA y que los terroristas no vuelvan a tener su espacio en instituciones democráticas, según ha explicado José Manuel Soria.
La ponencia política aborda aquellas materias en las que considera imprescindible lograr pactos de Estado: "organización territorial, estatutos, justicia, lucha contra el terrorismo y educación". Soria ha asegurado que el PP "siempre estará dispuesto a hablar con el gobierno y el resto de fuerzas parlamentarias" y ha sentenciado que son "los dos grandes partidos los que deben buscar consensos razonables"