El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha advertido este viernes a la UE de que no puede "menospreciar" las distintas realidades europeas si no quiere continuar creando desafección entre los ciudadanos, después de que el Reino Unido haya decido dejar la UE. También ha animado a los escoceses que han votado contra el Brexit "y en las decisiones que puedan tomar en el futuro"
En una valoración del referéndum desde la sede del Govern en Girona, ha insistido que en Europa hay distintas voces y descontento: "Los dirigente de la UE han sido poco sensibles a esta diversidad".
También ha señalado que no han sido sensibles al sufrimiento de las clases medias y populares que, según él, han visto como la UE parecía más un "proyecto de elite que un proyecto de la ciudadanía".
"Debe reflexionar sobre su poca disposición a desburocratizar Bruselas, su lentitud y su indecisión, o la falta de liderazgo, en temas que preocupan a los ciudadanos europeos y que, por lo que parece, preocupan poco a sus dirigentes", ha expresado el presidente.
EFECTO EN CATALUÑA
Puigdemont ha pedido a la UE que empiece a trabajar para evitar que crezca "la desafección europea, las propuestas populistas y el riesgo de la xenofobia", y ha afirmado que Cataluña tiene la voluntad de contribuir a la construcción como estado independiente de una UE que reconnecte con los ciudadanos.
Preguntado sobre el efecto que puede tener en Cataluña la decisión del Reino Unido, Puigdemont ha asegurado que dependerá de la gestión que las instituciones europeas hagan de esta situación y cómo se lleven a cabo las negociaciones en el ámbito económico y comercial para la separación.
Ha asegurado que si hoy Escocia fuera un país independiente habría votado por mantenerse dentro de la UE, y ha animado "a todos los escoceses que han participado en esta decisión y en las decisiones que puedan tomar en un futuro".
El presidente ha criticado la reacción de los principales partidos españoles ante el resultado del referéndum: "Ha sido un ejercicio de democracia impecable, y está siendo criticado. Que no nos guste el resultado no convierte a los referéndums en un mal instrumento".