En declaraciones a los medios de comunicación en Orense, donde ha participado en la campaña para las elecciones del 1 de marzo, Rajoy ha defendido que personarse en la causa que investiga la supuesta trama de corrupción es "el mínimo derecho" que tiene su partido, aunque hoy mismo el juez Baltasar Garzón ha rechazado la personación como acusación particular que el PP presentó ayer ante la Audiencia Nacional.
"Se intenta hacer una causa general contra el PP. Queremos estar allí, saber a quién se acusa del PP y de qué", ha aseverado el líder de los 'populares', quien también ha reclamado que se levante el secreto de sumario "para saber exactamente de qué estamos hablando". Rajoy ha explicado que en los medios de comunicación figuran "nombres de muchas personas, de gente honorable que lógicamente ven manchada su reputación" y que, sin embargo, "no pueden defenderse".
Mariano Rajoy también ha calificado de "atentado a la calidad de la democracia" la cacería en la cual coincidieron el ministro de Justicia y el juez instructor de la Operación Gürtel para justificar la petición de dimisión de Bermejo y que Garzón se abstenga en esta causa. su juicio, es "impropio" que el ministro de Justicia "esté reunido" con el juez instructor de la Audiencia Nacional y ha advertido de que "en cualquier país civilizado", ello conllevaría la dimisión, en este caso de Bermejo, y que Garzón "se abstuviese en el asunto del que está conociendo".
Para justificar su reclamación, Rajoy ha apelado a un símil futbolístico y señaló que "es algo parecido" a que en un partido se pitasen tres penaltis injustos en contra de un equipo y que al día siguiente se supiese que el entrenador del club ganador estuvo cenando con el árbitro. "Es exactamente lo mismo, la misma regla democrática". Por ello, ha afirmado que "el mínimo pudor, el mínimo sentido común" exige la dimisión del ministro de Justicia o si no, el cese por parte del presidente del Gobierno, así como, "desde luego, la abstención de Garzón en este asunto". CGS