El jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, asegura que España afronta su presidencia de turno de la UE con el "mejor entusiasmo" para sacar a Europa de la crisis económica y hacer que los ciudadanos se sientan más identificados con el proyecto europeo.
En un mensaje institucional con motivo del comienzo de la presidencia española divulgado en la página web oficial (www.eu2010.es), Zapatero afirma que su gran reto es dejar atrás la crisis y hacer de Europa "una economía cada vez más productiva, más innovadora y más sostenible" con el apoyo de trabajadores y empresas.
La crisis, el gran reto
Un nuevo horizonte económico y político se abre con 2010, en teoría, año de salida oficial de la denominada 'Gran Recesión'. Las tasas de crecimiento del PIB comienzan a mostrar valores positivos y la puesta en marcha del Tratado de Lisboa supondrá la oportunidad para plantear la importancia de un Gobierno económico comunitario, capaz de reconducir la situación actual a una fase de crecimiento sostenible basado en nuevos sectores y en empleo de calidad.
Según Zapatero, hacer que las empresas sean más productivas y los trabajadores más capacitados debe ser compatible con el "gran símbolo que en Europa representa el estado del bienestar y las políticas sociales".
La igualdad en múltiples campos
Otra de las prioridades, siempre presentes en los discursos gubernamentales será la igualdad entre los ciudadanos. Un objetivo que el Ejecutivo de Zapatero convertirá en su seña de identidad en asuntos como las políticas de género e identidad sexual, que han marcado los aspectos más llamativos -y discutidos- de la legislatura y media durante la que ha gobernado en España.
Relaciones internacionales
Pero Europa no debe mirarse el ombligo. Uno de los puntos más importantes será la política exterior y el papel de la UE en determinados acuerdos y conflictos en los que puede desempeñar un papel crucial. De este modo, destacan numerosos encuentros como el Diálogo Transatlántico con los EEUU de Obama, la cumbre con Rusia y con Marruecos, entre otros países relevantes.
Zapatero hace hincapié en la nueva etapa que se abre con el Tratado de Lisboa, que desde su entrada en vigor el pasado 1 de diciembre establece el marco institucional de la UE de los Veintisiete.
Al mismo tiempo reconoce que "Europa, desde hace tiempo, necesita algún cambio de más profundidad", como es que los ciudadanos "sientan más de cerca las instituciones".
Zapatero está convencido de que el nuevo Tratado hará que Europa sea "más eficaz y más dinámica" y contribuya a "unir más a los europeos" con el fin de que estos den "más apoyo" al proyecto comunitario.
Por ello, anima a la ciudadanía a apreciar que la UE tiene como referente principal las políticas que inciden directamente en sus problemas y derechos, como la consolidación del principio de igualdad entre hombres y mujeres.
América Latina
Mención aparte merecen los encuentros con los diversos países de América Latina, donde España aportará el valor añadido de la lengua española y del acercamiento entre comunidades. Si hay quienes pueden esperar mucho de esta presidencia europea, esos son los países latinoamericanos. De este modo se celebrarán importantes cumbres con los países del Caribe -con la situación política en Cuba como uno de los temas principales-, los de la Comunidad Andina, Mercosur y Centroamérica, donde Méjico ocupará un lugar destacado.
Mucho por hacer y unas fechas que suponen un reto y una oportunidad. La Presidencia española comienza y con ella el protagonismo de España en el mundo adquiere más importancia que nunca. En seis meses conoceremos los resultados. A.V.