La austeridad, la reducción del gasto público y la bajada de impuestos han sido las recetas que ha defendido Aguirre en el debate monográfico sobre la crisis y el paro que se ha celebrado hoy durante más de cuatro horas en la Asamblea de Madrid, donde se ha aprobado mantener la congelación de sueldos de los miembros del Gobierno regional y altos cargos en 2010.
De las alrededor de 130 medidas propuestas por la oposición, el PP no ha aceptado ninguna, mientras que la iniciativa del grupo popular de pedir un Plan Regional de I+D+i ha sido la única apoyada por unanimidad de la Cámara.
Entre las resoluciones aprobadas figura una que insta al Gobierno de España a llevar a cabo diez "reformas estructurales", como aplicar la austeridad del gasto público, reducir impuestos, realizar una "profunda" reforma laboral, abordar el problema energético, convocar el Pacto de Toledo, fomentar la colaboración público-privada y apostar por la calidad de la enseñanza.
La supresión de la Consejería de Cultura, Deporte y Turismo, la eliminación del recargo autonómico del Impuesto de Actividades Económica (IAE) y la reducción del tramo autonómico del IRPF en la compra de una primera vivienda de obra nueva son otras de las medidas aprobadas.
El resto de las resoluciones instan al Gobierno regional a ampliar a 10.620 millones de euros los créditos de Avalmadrid para pymes y autónomos, y a presentar un Plan de Industria 2009-2012 (892 millones de euros) y un Plan Regional de I+D+i, (PRICIT 2009-2012) dotado con 3.000 millones de euros.
También, a rebajar el periodo administrativo de creación de empresas y pago a proveedores, y a ejecutar un "programa para la reactivación económica y el empleo" compuesto de 50 medidas.
Aunque no figura entre las resoluciones aprobadas por el pleno, Aguirre ha anunciado que bonificará el 20% del impuesto de matriculación a los madrileños que adquieran un vehículo, para reactivar el sector de la automoción, uno de los más afectados por la crisis económica.
La presidenta ha detallado las causas que, a su juicio, han provocado que España se haya convertido en "la fábrica de parados de Europa": el mal funcionamiento de los organismos reguladores de crédito, un marco de relaciones laborales obsoleto, la excesiva presión fiscal, el exceso de burocracia, unas fuentes de energía caras y escasas y un sistema educativo que no reúne suficiente calidad.
La portavoz del PSOE, Maru Menéndez, ha afirmado que la "austeridad" que pregona la presidenta consiste en "enriquecer con dinero de todos los madrileños a los Gürtel", y ha calificado sus recetas de "antiguas" e "irrisorias".
La portavoz socialista ha hecho hincapié en que Madrid está "sufriendo efectos perversos peores que la media del Estado" y ha reclamado a Aguirre que "luche" por el empleo en las empresas afectadas por expedientes de regulación de empleo (ERE).
Por su parte, el coordinador general de IU, Gregorio Gordo, ha acusado a la presidenta de "improvisar" medidas que "profundizan en el modelo caduco" que, a su juicio, ha originado la crisis, y ha pronosticado que Madrid superará los 600.000 parados antes de terminar el año.
Tras escuchar las intervenciones de la oposición, Aguirre ha afirmado que frente a la "mesura" y el "equilibrio" de Gregorio Gordo, el PSOE va camino de "convertirse en una fuerza política marginal en Madrid", y ha asegurado que quiere "estudiar a fondo la propuesta de Izquierda Unida para que los parados a los que se les acaba el subsidio reciban alguna ayuda de los poderes públicos".
Según ha explicado, está "absolutamente de acuerdo" con esa idea, aunque no se ha mostrado partidaria de pagarlo con el dinero de los contribuyentes madrileños.
El portavoz del PP, David Pérez, ha sostenido que el Gobierno de Zapatero "ha desperdiciado cinco años vitales" para acometer reformas estructurales, y le ha responsabilizado de "arrastrar" a España a la "ruina económica".