Así lo ha asegurado el diputado Jon Iñarritu, miembro de Aralar, tras expresar su satisfacción por la condena impuesta a España por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) al estimar el recurso del director del diario Egunkaria Martxelo Otamendi contra el archivo de la denuncia que presentó acusando de torturas a la Guardia Civil.
A su juicio, esta sentencia ratifica la "denuncia social" conocida en el País Vasco acerca de que "en el contexto de violencia de ETA se han producido casos de tortura, que no se han tomado medidas y que cada vez que se han denunciado no se ha investigado".
Para Iñarritu, "la violencia de ETA ha acabado" con lo que es momento de que las autoridades españolas "den pasos" y acaben con leyes y medidas "de excepción".