Después de que el juicio por el soplo a ETA haya quedado visto para sentencia a las puertas de la Audiencia Nacional, el abogado José Luis Vegas ha expresado ante los medios de comunicación su confianza en que los acusados sean absueltos por las "contradicciones" en la investigación y al no haber quedado acreditado que su cliente entregara el teléfono desde el que se dio el soplo al dueño del bar 'Faisán', Joseba Elosua.
"No hay nada más allá de los descalificativos y la fluidez verbal del Ministerio Público", ha aseverado el abogado de la defensa, para confiar en que el tribunal dictará una sentencia absolutoria con la ratificación de que el exjefe superior del País Vasco Enrique Pamies y el inspector José María Ballesteros "no han hecho nada" y "los verdaderos culpables tristemente siete años después no vamos a poder saber quienes son".
El letrado se ha expresado así después de que el fiscal pidiera entre un año y medio de cárcel y dos por revelación de secretos o bien cinco años por colaboración con organización terrorista, siguiendo instrucciones de Torres-Dulce. "Pamies era el táctico, el que decide cómo se hace en el terreno la estrategia pero la estrategia la hace alguien que no está en el terreno", dijo el fiscal Carlos Bautista en su informe definitivo de conclusiones.
A LAS 11.23 NO SE PRODUJO EL SOPLO
Por su parte, la abogada de Pamies, María Ponte, ha negado que la llamada de las 11.23 horas sea la del soplo como sostiene el equipo investigador puesto que Elosua estaba en ese momento "en la perfumería" de su yerno "y no en el bar Faisán". A su juicio, las acusaciones solo han barajado "indicios y conjeturas".
Ponte ha remarcado que tampoco ha quedado acreditado el móvil de la filtración y ha concluido que las pesquisas de los investigadores partieron de una llamada entre dos policías sin investigar "el resto de posibilidades".
"Es un sumario de 30 tomos y miles de periciales pero al final está la cinta de vídeo, la audición y los listados de teléfono. No hay mucho más", ha finalizado.