Barkos dice que "el cambio en Navarra es una realidad" mientras la oposición critica su gestión

EUROPA PRESS 27/10/2016 19:37

En su intervención en el hemiciclo del Parlamento foral, Barkos ha dicho que quiere "ampliar el espacio para el acuerdo al resto de fuerzas políticas que desde posiciones de oposición legítima creo que son imprescindibles para la construcción de los fundamentos básicos de una sociedad en progreso y civilizada".

Ha ofrecido así de "forma abierta" cuatro ámbitos de unidad para el interés de Navarra. "Debemos estar unidos en la defensa del Convenio como eje vertebrador de nuestro autogobierno; debemos estar unidos en el reposicionamiento europeo de Navarra como reto esencial en la construcción de nuestro futuro social y económico; debemos estar unidos en la defensa del euskera como lengua y patrimonio de todos y debemos estar unidos en el avance y consolidación del proceso de convivencia pacífica de nuestra sociedad desde las premisas de reparación y memoria para todos", ha dicho.

La jefa del Ejecutivo no ha convencido a los grupos de la oposición. Así, UPN, PSN y PPN le han dedicado palabras de crítica por su gestión al frente del Gobierno de Navarra, utilizando calificativos como "decepción", "autocomplacencia", "inacción", "retroceso" e "inestabilidad".

La presidenta ha señalado a los grupos de la oposición que "la suma aritmética tan fría como rigurosa y soberana del reparto de escaños de esta Cámara expresó una voluntad manifiesta de cambio", pero ha dicho que "caeríamos en el error que ustedes cometieron si nos aisláramos en nuestro acuerdo firmado en julio del pasado año" entre los cuatro socios de Gobierno.

Así, Uxue Barkos ha aspirado a "contar" con la oposición. "De ustedes depende que construyamos en común o que se queden al margen de la nueva sociedad que está emergiendo ya", ha expuesto.

La jefa del Ejecutivo ha tenido palabras de "agradecimiento" para las fuerzas del cuatripartito y para su equipo de Gobierno y ha valorado el "esfuerzo" y la "responsabilidad demostrada" en este "primer año de cambio". Según ha dicho, desde la "serenidad, el sentido común y el trabajo, hemos sido capaces de demostrar que otra forma de gobernar y una mirada más social es posible en Navarra".

"ERRORES"

La presidenta ha reconocido que el Gobierno ha cometido "errores" fruto "fundamentalmente de la inexperiencia" y también ha admitido que "hay quien puede no haber visto cumplidas todas sus expectativas en este primer año".

"Pero el cambio para ser sólido requiere tiempo, y si alguien creía que en un año íbamos a poder revertir 20 años de políticas de UPN estaba equivocado", ha planteado Barkos, para remarcar que en este primer año el Gobierno ha sido "capaz" de "poner el foco en lo urgente y en lo apremiante". "Y hemos acometido cambios profundos e importantes, pero con la serenidad suficiente para que puedan ser comprendidos y asimilados", ha aseverado.

Ha aprovechado su intervención para criticar el panorama "dramático" y "desalentador" que se encontró su Ejecutivo a su llegada y ha destacado que durante el primer año de legislatura su equipo se "ha afanado" en "hacer frente" a esta situación.

Ha afirmado que el año 2017 "debe ser un año crucial en la defensa del Convenio Económico" y ha manifestado que "es incuestionable que hoy como siempre compartimos el objetivo de negociar el mejor Convenio". "Espero que todos nos encontremos en mantener posiciones negociadoras tan leales como firmes en la defensa de los intereses de nuestra sociedad", ha dicho.

"En este, como en tantos otros asuntos, el concurso de la representación parlamentaria plena es nuestra mejor arma política", ha expuesto la jefa del Ejecutivo, quien ha pedido "consenso para encarar los retos que la sociedad navarra tiene de cara a 2017". Y se ha referido así al proyecto de ley de Presupuestos que "traeremos a este Parlamento la próxima semana", ha indicado.

REPROCHES DE UPN, PSN Y PPN

Tras escuchar la intervención de Barkos, el portavoz de UPN, Javier Esparza, ha afirmado que la presidenta se presentó en su investidura hace quince meses con "la imagen de una persona moderada y dialogante, y han bastado quince meses para que se quite la careta, para que la expectación se haya convertido en decepción".

El líder regionalista ha dicho que el Gobierno no ha obtenido "resultados palpables" y no ha "mejorado" ni en la actividad económica ni en salud, educación o políticas sociales. "Los ciudadanos se han dado cuenta de cuáles son las verdaderas intenciones del Gobierno, que se resumen en más nacionalismo, más Euskal Herria y menos Navarra, y eso lo está dejando clarísimo desde el primer minuto de la legislatura", ha afirmado.

Por parte del PSN, María Chivite ha afirmado que el Gobierno de Navarra ha caracterizado por la "inacción" en materia económica y ha defendido que "es necesario un impulso más decidido y valiente para que haya un despegue; hace falta desarrollo económico y empleo".

Además, la dirigente socialista ha dicho que le "preocupa" la "dependencia excesiva o total" del Gobierno foral hacia el cuatripartito y ha afirmado que el Ejecutivo "debe ser una institución autónoma", por lo que ha esperado que la presidenta Uxue Barkos "suelte lastre".

La portavoz del PPN, Ana Beltrán, ha sido muy crítica al afirmar que el primer año del Gobierno de Navarra "ha sido el del retroceso económico, el de las decisiones sectarias e identitarias, el de las imposiciones, el de los ceses y el de la inestabilidad social, política y económica" y ha asegurado que durante este tiempo "ha primado la revancha, el odio y la mirada al pasado".

"Ha sido un primer año vacío de contenido, sin priorizar lo que anunciaba en su discurso de investidura. Un año de Gobierno gestionado desde el odio, la revancha, la imposición de lo vasco, buscando fractura social y el acoso y derribo", ha reprochado Beltrán a Barkos.

Tras el turno de la oposición, ha llegado la intervención de los cuatro socios que sostienen al Gobierno de Navarra, empezando por Geroa Bai, cuyo portavoz Koldo Martinez ha defendido la gestión del Ejecutivo foral, del Gobierno de "todos y todas", y ha acusado a la oposición de "estar actuando como niños enrabietados cuando se les quita el balón". Por ello, les ha pedido que "empiecen a sumar" y a "criticar con fuerza, pero con argumentos".

Por su parte, el portavoz de EH Bildu, Adolfo Araiz, ha manifestado que "el trabajo en el último año es positivo para nosotros, pero también hay claroscuros" y por ello ha dicho que "no podemos caer en la autocomplacencia". "El objetivo del cambio no es apartar a UPN y PSN del ámbito de la gestión institucional, sino saber que ese es el punto de partida para la construcción de otra Navarra", ha apuntado.

Desde Podemos, Laura Pérez ha defendido que "son muchos los logros" que las cuatro fuerzas que sostienen al Gobierno de Navarra "han conseguido con esfuerzo y generosidad" durante el último año, aunque ha reconocido que "en ocasiones los tiempos han sido más lentos de lo que nos gustaría". "Si el año 2016 ha sido el de las medidas de choque en emergencia social, 2017 tiene que ser el año de revertir las políticas anteriores de UPN", ha dicho.

Finalmente, el portavoz de Izquierda-Ezkerra, José Miguel Nuin, ha realizado una valoración "global positiva" del trabajo del Gobierno foral durante estos 15 meses, lo que "no oculta lo mucho que queda por hacer ni las discrepancias que hemos tenido". Ha manifestado así el "compromiso" de I-E "con el cambio". "Navarra no ha desaparecido, no se ha convertido en la cuarta provincia de la CAV, no ha pedido la independencia... y esto no ha sucedido porque el Gobierno no tiene ningún mandato para que Navarra se independice de España