El grupo de protesta, que portaba pancartas con textos como "titiriteros libertad", "sátira no es delito" o "Je suis Títeres desde Abajo" -en alusión al nombre de la compañía a la que pertenecen los detenidos- y algunos de los cuales lucían estética de extrema izquierda o llevaban el rostro cubierto, ha comenzado a silbar y gritar cuando han subido al escenario la primera teniente de alcalde, Marta Higueras, la concejal de Cultura y Deportes, Celia Mayer, y Galcerán, que ha sido la única en tomar la palabra.
Galcerán ha intentado hacer su discurso, pero las constantes interrupciones de los manifestantes han impedido que se haya podido escuchar sus palabras por los altavoces de la Plaza de la Remonta. Tras esto, ha dado paso a la pregonera, que ha afirmado que llevaba escrito un pregón de seis folios que no ha podido desarrollar. Por ello, ha pedido directamente paso al número musical, solicitando a los técnicos de sonido que subieran más el volumen de la megafonía.
Tras concluir el número, la pregonera ha abandonado el escenario y se han reproducido varios minutos de música. A continuación, otro presentador ha subido a la palestra, de nuevo con interrupciones, y ha rechazado ceder el micrófono a los manifestantes que se lo solicitaban.