En declaraciones a los medios en Montjuïc, delante de las cuatro columnas de Puig i Cadafalch, ha afirmado que "la culpa del colapso de este jueves no es de un informático ni de un chip, sino del Gobierno de Mariano Rajoy y de los precedentes" que, según el candidato, reconocen no haber invertido 3.600 millones de euros.
"El Estado no cree en Rodalies del área metropolitana porque no ha invertido todo lo que se había comprometido a invertir", ha sentenciado.
Bosch ha defendido que la solución al problema de Rodalies pasa por conseguir un Estado catalán, y ha pedido al conseller de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila, "que diga la verdad, que es muy cruda".
El republicano ha aseverado que podrían crearse 40.000 puestos de trabajo en Barcelona si fuera la capital de un Estado, y lo ha comparado con la reunificación alemana que, dice, generó cerca de 60.000 en Berlín.
Estas son algunas de las consecuencias que Bosch prevé para la ciudad si Catalunya se convierte en un país independiente y que ha presentado en un cartel que también prevé 3.000 millones de euros anuales correspondientes al déficit fiscal y el crecimiento de la inversión extranjera.
"El plafón con propuestas no lo hemos hecho este jueves por la mañana a toda prisa por los atrasos", ha bromeado.