Relación epistolar, a la antigua, no podía ser menos, para abordar una cuestión que viene de siglos. Mariano Rajoy ya tiene lista su carta de respuesta a la de Artur Mas: ofrece negociar financiación, pero, desde el respeto a la Constitución. "Si hay que votar, tendremos que votar todos. Porque si hemos de romper España o hemos de mantener España es una decisión que hemos de tomar todos los Españoles", decía anoche el vicesecretario de Estudios y Programas del Partido Popular, Esteban González Pons. En un acto del PP catalán con emprendedores, su presidenta, Alicia Sánchez-Camacho, ha querido "recordar al señor Artur Mas que es un presidente autonómico constitucional". En este mismo acto ha participado el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, que ha mandado un mensaje "a todos los siete millones y medio de catalanes el Gobierno les dice que estén tranquilos, que estén serenos, que la ley, evidentemente, se va a cumplir y se va a hacer cumplir. Que el Gobierno tiene voluntad de pacto, voluntad de diálogo, voluntad de llegar a acuerdos en beneficio de lo que es bueno para los catalanes". Convergencia también quiere tranquilizar a los catalanes, sobre todo a los mayores, a los que llegaron de otros puntos de España. Artur Mas es consciente de que todo este proceso puede dar miedo. Aunque da la sensación de que el pescado está vendido. O casi. Ya piensa en su próxima carta. "Pues yo lo que intentaré es dar una respuesta lo más conjunta, unitaria y de consenso de las formaciones políticas catalanas", ha explicado. Que es la mejor forma, dice el president, de estar a la altura de un pueblo que merece una puerta abierta, una salida que satisfaga a todos.