También establece la obligación de indemnizar con 30.000 euros a cada hijo menor del fallecido y 60.000 euros a la viuda del fallecido, difiriendo su determinación a la fase de ejecución de la sentencia e imponiendo los intereses legales desde la fecha de los hechos hasta la fecha del fallo.
La sentencia de la Audiencia considera probado que el sábado 9 de octubre de 2010 el condenado, apodado 'El Morretes', se encontraba con el fallecido, conocido como 'El Toro' sentado en un banco del citado parque, entre la Vía Carpentana con el Camino de la Laguna de Madrid.
Entonces el condenado propinó una serie de puñetazos a la víctima que provocaron su caída al suelo y mientras permanecía en esa situación continúo propinando patadas y pisándole la cabeza. En este sentido, el jurado entiende que actuó con ánimo de quitarle la vida o aceptando que esos golpes podían generarle la muerte.
Como argumentación, expone que la zona corporal atacada es precisamente de carácter vital y que existían diversos testimonios que corroboraban la agresión. La sentencia también recoge que se decide imponer la pena mínima a la vista de la condición alcohólica del acusado, acreditado por un informe de la Clínica Forense de la Audiencia.