Berlusconi, quien vive inmerso en el escándalo por el divorcio de su segunda esposa, Verónica Lario, registra ahora un índice de confianza del 53 por ciento frente al 56 por ciento que tenía el mes pasado, poco después del terremoto que devastó el centro de Italia y que dejó cerca de 300 víctimas mortales.
"Quizá por culpa del divorcio con 'la señora Verónica', quizá por la línea dura sobre la inmigración. Pero para Silvio Berlusconi la luna de miel post-terremoto, que lo había llevado hasta la cuota del 56, parece acabada", dice el diario.
"La Repubblica" recuerda que este dato del índice de confianza de los italianos en Berlusconi fue peor en marzo pasado, cuando el primer ministro registró un 52 por ciento.
La confianza de los italianos en el Gobierno del país baja también este mes, volviendo a marcar el mínimo del 44 por ciento que ya tuvo en marzo.
Suben, sin embargo, los partidos de la oposición: el Partido Democrático (PD) se sitúa en un 33 por ciento (dos puntos más), la Unión de Demócratas Cristianos y de Centro (UDC) llega al 34 por ciento (uno más), e Italia de los Valores (IDV) escala hasta el 41 por ciento (cuatro puntos más).