El portavoz adjunto del Departamento de Estado, Gordon Duguid, no quiso pronunciarse más detalladamente sobre el nuevo Gobierno israelí que, encabezado por el líder del derechista Likud, Benjamín Netanyahu, entró hoy en funciones.
"Por supuesto vamos a reunirnos con el nuevo Gobierno y comenzar nuestras discusiones, en las que les explicaremos cuáles son nuestras políticas y nuestro apoyo a la solución de dos Estados y nuestro punto de vista sobre la mejor manera de avanzar" en el proceso de paz, explicó en su rueda de prensa diaria.
Duguid agregó que no tiene más comentarios que hacer, pues el nuevo Ejecutivo israelí, el más amplio en los sesenta años de existencia del Estado judío, al constar de treinta ministros, acaba de tomar posesión.
El líder laborista, Ehud Barak, conservará el ministerio de Defensa, mientras que Avigdor Lieberman, que preside Israel Beitenu, será titular de Exteriores.
Previamente a su jura como primer ministro israelí, Netanyahu, advirtió a la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que si quiere la paz, debe "combatir el terrorismo".
"La economía, la seguridad y la diplomacia son el camino para la paz", dijo Netanyahu, sin mencionar la creación de un Estado palestino, algo por lo que pugna la ANP, del moderado Mahmud Abas, así como EE.UU.
Indicó de forma vaga que buscará una paz global con sus vecinos árabes y el mundo musulmán, y que abordará el diálogo de paz con "sinceridad y mente clara".