Exnovia de Pujol Ferrusola dice haber escuchado cómo se amañaban comisiones

EUROPA PRESS 31/07/2014 14:00

En declaraciones a Cuatro recogidas por Europa Press, Álvarez ha dicho que nunca presenció esos tratos, pero que sí escuchó conversaciones de Pujol Ferrusola sobre esos concursos. Según ha dicho, las comisiones eran "a veces el tres por ciento, otras el cuatro, el cinco o el 20" del importe del concurso, y en otras consistían en dar entrada en algún negocio a alguien de la familia Pujol.

Álvarez ha explicado que se decidió a denunciar el caso por consejo de su abogado, "obligada a raíz de una conversación grabada con muy mala uva", aludiendo así a su encuentro con la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, en julio de 2010, que fue grabada por una agencia de detectives.

Según ha dicho, su abogado le aconsejó denunciar diciéndole que sólo faltaba que la pudiesen considerar cómplice y porque ya sabía "desde hacía tiempo" que Jordi Pujol Ferrusola estaba sometiéndola a un "acoso tremendo.

En este punto, ha precisado que el hijo del 'expresident' intentó comprarla con "coacciones" y con regalos que, según ha dicho, ella devolvía. "De todo tipo, ropa carísima, también me ofreció coches y dinero en efectivo", ha relatado.

¿UN PACTO DE ESTADO DE PERMISIVIDAD?

En su opinión, si los casos están saliendo ahora a la luz es porque la gente está "empezando a perder el miedo" y porque han salido otros casos de corrupción en toda España. A su juicio, habrá gente en CiU a quien este asunto le habrá sorprendido, pero "los que llevan mucho tiempo no tienen que estar sorprendidos de nada".

"Toda esta permisividad de los Pujol tiene que haber sido un pacto de Estado, de 'a mí no me toques'", ha llegado a decir. Es más, cree que todo este asunto, que en otros países "terminaría con una condena", en España se quedará en un "escándalo público".

Además, ha relatado que en marzo de 2013, tres meses después de haber declarado ante el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, le llegó información "muy peliaguda" y la remitió a la Oficina Antifraude de Cataluña, porque su abogado le aconsejó utilizar esa vía para que los documentos llegasen al juez en lugar de exponerse ella a una nueva declaración.

Sin embargo, ha dicho que empezó a ver que esos documentos aparecían donde no debían y no habían sido entregados al juez y que por eso su abogado actuó para que Ruz reclamase esa documentación y que Manos Limpias les "echó una mano".