El 8 de enero de este año, Manuel A., entonces jefe de la unidad del módulo MR4 de Quatre Camins, fue sorprendido por el director en funciones de la prisión y por un cabo de los Mossos d'Esquadra cuando llevaba encima 15 papelinas de heroína y varios sobres de hachís con la intención de vendérselas a los internos.
El hachís decomisado habría alcanzado en el centro un valor de 7.816 euros y la heroína 4.380 euros, según la calificación del fiscal previa al juicio que se celebrará este jueves a las 9.30 horas en la sección 2ª de la Audiencia de Barcelona.
Además de la droga, el funcionario llevaba en la chaqueta del uniforme un sobre con 1.000 euros fraccionados en 17 billetes de 50 euros, siete de 20 euros y otro de 10 euros, procedentes "del tráfico de sustancias estupefacientes que había llevado a cabo".
Por todo ello, el fiscal pide, además de los ocho años de cárcel, una multa de 36.000 euros y su inhabilitación como funcionario, acusándolo de un delito contra la salud pública.